Llegan las primeras impresiones del spin-off de Crónicas Vampíricas y Los Originales: Legacies. The Vampire Diaries es una serie ya mítica para muchos espectadores y cuyos personajes nos han traído múltiples alegrías para el cuerpo. Era una serie de vampiros a lo True Blood pero sin aquellos desnudos abundantes y con una trama más adolescente en sus inicios. The Originals fue un sucedáneo de aquel efectivo producto que se centraba en una peculiar familia de chupasangres de donde rescatamos su peculiar ambientación en Nueva Orleans, lugar muy apropiado para este tipo de criaturas y otras más peludas en donde también tenían cabida los aquelarres de brujas. Si ambas series ya nos trajeron un variopinto surtido de monstruos, ahora llega este peculiar legado, fusión de esos dos seriales y cuyo epicentro es la Academia Salvatore. Un lugar donde los hijos de todo aquel personal de frikis ha ido a eclosionar. La verdad es que este nuevo show deja bastante a cuadros ya que nos encontramos entre un cruce a lo Harry Potter y una película fantástica de sobremesa de esas de SyFy donde vamos a encontrar animales fantásticos y seres mitológicos que seguramente no habrían tenido cabida en las otras series de marras. Un comienzo algo flojillo con cosas algo ridículas (supuestamente a modo de guiños) que desembocan en algo extraño que acaba enganchando con sutileza. No sabemos a estas alturas si esto va a ser una tomadura de pelo o por el contrario una serie de culto pero lo que es seguro es que de momento, cuenta con el poder de enganchar tanto a los curiosones de los diarios con colmillos, tanto así como a las nuevas generaciones que tienen aquí todo lo que buscan. Romance, aventura y más fantasía que terror en esta ocasión. Veremos como evoluciona todo este cóctel pero de momento y en pocos capítulos, la ida de pinza ya está asegurada.