La segunda temporada de Runaways se presentaba como algo realmente genial, como una aventura repleta de acción y casi consigue encandilar esta vez por completo. De los 13 episodios de los que consta esta nueva entrega basada en los cómics de Marvel, salvamos los ocho primeros que tienen cierta consistencia y en donde todo sigue una trama bastante lógica. Sin embargo, los cinco capítulos restantes comienzan a perderse en subtramas que apenas interesan, en donde aparecen malos con poco o nada de carisma y en donde los protagonistas principales comienzan a interactuar en exceso con sus padres hasta el punto de volverse tontos a ojos del espectador. Excepto algún que otro momento puntual, todo desemboca en un final precipitado y un poco cutre que pretende asegurarse una preciada tercera temporada pero que arruina casi todo lo bueno visto hasta ese quinteto fatal. Nos queda nuevamente, un serial hasta cierto punto entretenido pero que de nuevo, sigue pecando de demasiado infantil e inocente. Que vale, que está protagonizado por adolescentes pero vamos, que muy niños de papá por muchos poderes que tengan. ¿O sea, no? Siguen detrás de ella Josh Schwartz y Stephanie Savage. Protagonizan principalmente Rhenzy Feliz, Gregg Sulkin, Virginia Gardner, Ariela Barer, Lyrica Okano y Allegra Acosta entre otros.