Director: Lars Klevberg – Género/Subgénero: Remake tecnológico – Reparto: Aubrey Plaza, Gabriel Bateman, Beatrice Kitsos, Ty Consiglio y Mark Hamill entre otros
Argumento: Un muñeco defectuoso va a parar a manos del joven Andy Barclay como regalo sorpresa. El juguete puede actuar de manera inteligente y autónoma. Lo que al principio parece ser una salida para este niño sin amigos, acaba por convertirse en una pesadilla asesina que culminará en una masacre inimaginable.
Hacer cualquier tipo de remake de una película de terror icónica es una mala idea, se mire por donde se mire. Los motivos son simples. Difícilmente podrás igualar a la original y tienes bastantes probabilidades de cagarla como bien ha ocurrido en el pasado con otras vueltas de tuerca innecesarias de títulos míticos. Por fortuna, este muñeco diabólico es bastante consistente pese a no parecerse en nada al filme original. Podríamos verlo como una reimaginación adaptada a los tiempos que corren. Es decir, este nuevo Chucky es un aparato inteligente que dispone de conectividades varias y que va aprendiendo a base de hacer crecer su base de datos. Y si, no hay asesino en serie que posea a la criatura de marras pero el planteamiento es bueno y coherente con lo que acontece después. Sinceramente, llegas a compadecerte del muñeco ya que tan solo quiere ganarse la amistad de su dueño hasta llegar al punto de convertirse en una especie de Atracción Fatal pero con una base de amistad, que se acaba saliendo de madre. Y todo ello por privar a este modelo Buddi de lo que realmente tenía que ser. Un electrodoméstico más de la casa y un buen amigo para tu hijo. Muñeco Diabólico (2019) termina por ser una peli muy entretenida, bien interpretada y con las muertes justas para satisfacer al espectador de terror medio. Aunque el diseño del muñeco pudo tirar para atrás en su presentación, si se ve la película acaba por ganarse tu cariño. Buenos (y esperados) momentos como el ataque en el centro comercial y un protagonista infantil bastante entrañable, hacen de este remake una obra nada desdeñable que no supera a la idea original pero que tampoco se queda para atrás con sus nuevas propuestas. Efectiva y te hace pasar un buen rato que es lo importante.