Nacido Para Matar (Born To Kill) es una miniserie dividida en cuatro partes que data del año 2017. Nos cuenta la historia de Sam, un joven aparentemente normal que al parecer oculta un lado psicópata que va emergiendo a medida que se relaciona con las demás personas de su entorno habitual. Es interesante como el personaje principal va cambiando de cara cuando le interesa o a medida que ve que no avanza en sus objetivos. El sentimiento de frustración le llevará cometer algún que otro crimen atroz aunque en alguna ocasión, le sorprendan sentimientos como la culpa o el remordimiento con los que no empatiza demasiado bien en primera instancia. Sus relaciones interpersonales también están basadas en la manipulación por lo que deja entrever en momentos importantes, lo vacio que está. Un drama británico salpicado con algo de violencia que está francamente bien para correrse una buena maratón un domingo por la tarde. Creada por Kate Ashfield y Tracey Malone. Protagoniza Jack Rowan que demuestra aquí un talento joven y emergente que a su vez, se encuentra secundado por Romola Garai que interpreta a la sufrida madre del complicado adolescente y que pudo sobrevivir al estigma que supuso intervenir en el fiasco de Dirty Dancing 2: Havana Nights. Un coming-of-age de los que marcan por lo que recomendamos su visionado.