La Matanza de Texas (The Texas Chainsaw Massacre, 2003) es un remake del clásico de Tobe Hooper dirigido por Marcus Nispel que se encuentra producido por Michael Bay que bajo su sello Platinum Dunes decidió hacer una oleada de revisiones y recreaciones de obras maestras del género de terror. El resultado fue una película entretenida pero muy lejos del filme original en el que se basa. La historia nos cuenta como un grupo de jóvenes viajan con un alijo de marihuana oculto en una piñata mexicana. Los problemas comienzan cuando recogen en carretera a una mujer que se suicida dentro de la furgoneta del grupo. En su búsqueda por hacer lo correcto y cumplir las normas sociales, se tropiezan con una familia de matarifes que se dedicará a aniquilarles uno por uno. Con bastantes variaciones respecto a la cinta de referencia, tenemos un producto final bastante decente pero muy lejos de ser incómodo o artístico. Reinicio para un título que ha tenido sus más y sus menos por sus correspondientes secuelas pero que es recordado hasta el día de hoy como género de horror sin precedentes. Protagonizan una inolvidable Jessica Biel (cuyo outfit cortó respiraciones) Mike Vogel (guapísimo como rubio recreado de la época) Eric Balfour, Jonathan Tucker (maravilloso en su papel) Erica Leerhsen y en la parte malvada Andrew Bryniarski como el nuevo Leatherface o R. Lee Ermey cuya presencia es impagable.