Título Original: The Hoarder – Director: Matt Winn – Género/Subgénero: Slasher
Intérpretes: Mischa Barton, Robert Knepper, Charlotte Salt y Valene Kane entre otros
Nivel de Caspa: Picores y enrojecimiento
Argumento: Dos chicas divagan sobre temas amorosos en una gran ciudad. En mitad de la noche, se plantan en un edificio de almacenes donde la gente guarda las cosas más variopintas. Acuden ahí con la intención de descubrir que hay en uno de los cubículos, pero se encontrarán con un terrorífico secreto que lleva guardado bajo llave, con un motivo más que razonable.
Bunker no es una película sobre algo oculto en un bunker o sobre gente encerrada en uno. El título hace referencia irónicamente o no, a esos espacios de almacenaje que la gente usa para guardar sus cosas en trámites de mudanza o simplemente para conservar objetos o ropa que no necesitan tener en su propio hogar, ya sea por problemas de espacio o porque no quieren desprenderse de estas pertenencias o venderlas. La cuestión es que las dos chicas protagonistas de la trama, van a parar a uno de estos sitios que podría verse como un bunker en cierta manera. El que haya estado en uno de estos lugares, sabrá que no son sitios muy acogedores.
Así pues, se nos presenta una historia en un principio bastante intrigante. A su favor, tenemos la ambientación terrorífica, fría, gris y oscura que tienen esta clase de edificios de almacenes. También cuenta con una premisa argumental que engancha desde el primer instante. En contra, podemos comprobar como el guión desvela demasiado pronto sus bazas y en poco menos de 40 minutos, ya nos dejan sin sorpresas y el espectador más o menos avispado, podrá hilar como irá cada situación a partir de entonces. Reseñar buenas secuencias como el momento con la alarma de incendios o los del sótano cuando descubrimos que hay dentro del cubículo de marras.
Bunker podría definirse como un slasher al uso. Si bien no se presenta como tal, al final acaba siéndolo. Cuenta con buenos efectos de maquillaje, unas muertes normalitas y un final que aunque se huele a kilómetros, tampoco deja un mal sabor de boca. En el reparto encontramos a caras conocidas como las de Mischa Barton (de la serie The O.C.) que parece estar muy volcada en el género de terror estos últimos años y se encuentra secundada por Robert Knepper (Prison Break) otro actor suficientemente sobrio e interesante. Destacar otros nombres a tener en cuenta, como los de Valene Kane o Charlotte Salt. En la dirección tenemos al casi debutante Matt Winn que no lleva el filme con mal pulso o por lo menos, no hace que el espectador se aburra en ningún momento. La película queda recomendada a los fans del slasher que no tengan muchas reservas y a los curiosos de turno.