Director: Craig Ross – Género/Subgénero: Payasos diabólicos – Reparto: Ángel Vargas, Lee Marks, Kareem J. Grimes, William L. Johnson, Carl Washington y Napiera Groves entre otros
Argumento: Un joven introvertido es asesinado por tres macarras en una fatídica noche. Lo que no imaginan es que su alma se va a reencarnar en un payaso diabólico apodado Killjoy. Una entidad oscura que empieza a aterrorizar al barrio en busca de venganza.
Killjoy es una mala película que ha pasado a la historia por ser un subproducto que muchos han acabado adorando y ha conseguido convertirse en saga gracias a ello. La trama es sencilla. Cuenta como el típico perdedor de turno, logra traspasar la frontera entre la vida y la muerte para saciar sus ansias de venganza. Graig Ross intentó hacer una película a lo Spike Lee que a su vez se inspiraba en excelentes filmes como Pesadilla en Elm Street o el Muñeco Diabólico. El resultado no fue ni de lejos, lo esperado. Un payaso que traslada a sus víctimas a otra dimensión a través de un camión de helados y en ese universo de baratillo pues acaba con ellas. Como decimos, la calidad no es ni de lejos, uno de los puntos fuertes de la producción pero todo fan del terror se ha cruzado con este horror (en el sentido más amplio de la palabra) alguna vez en la vida. Igualmente, decir que es lo peor que se ha visto serían palabras mayores. Como curiosidad o culto posterior, hay que verla. Aunque luego sea odiada desde lo más profundo. O amada si eres un frikazo de tomo y lomo.