Directores: Juliana Rojas & Marco Dutra – Género/Subgénero: Trabajo inquietante – Reparto: Helena Albergaria, Marat Descartes, Naloana Lima, Gilda Nomacce, Marina Flores, Thiago Carreira y Lilian Blanc entre otros
Argumento: Una mujer adquiere un local para montar un supermercado de barrio. Tras ciertas dudas, comienza su negocio como empresaria. Contrata personal para la tienda y a una chica para que le haga las labores del hogar, mientras ella inicia esta nueva aventura laboral. Lo que no sospecha es que el sitio, tiene cierta aura negativa que pronto empezará a manifestarse. Olores extraños, grietas que se abren y líquidos negros que emergen del suelo.
Título brasileño de toques inquietantes que convierten a este filme en una apuesta distinta a lo que vemos normalmente. La trama nos adentra en las penurias del mundo laboral a través de un matrimonio peculiar. El hombre busca un trabajo de provecho y vemos como pasa un infierno en sus entrevistas con situaciones que todos hemos vivido en alguna ocasión y que podríamos tachar de ridículas pero que a su vez, resultan muy cercanas y veraces. La mujer en cambio, decide coger las riendas de la casa y su destino, abriendo un negocio para ser así, su propia jefa. Hasta aquí podríamos decir que es un drama costumbrista al uso. Lo que la hace diferente en sí, son sus tintes de suspense que en alguna ocasión, llegan a acariciar el género de horror. Aparte de la pareja protagonista, tenemos un tercer elemento importante. El local donde transcurre gran parte de la filmación que ya da mal fario desde el minuto uno. Una dirección solvente, un guión bastante bueno y una fotografía decente, convierten a Hard Labor en una recomendación un tanto arriesgada pero que seguro gustará a los amantes del cine más independiente. Como pega, le falta algo de garra y un cierre más rotundo pero lo importante, es que sabe generar cierto interés en el espectador. Y eso ya suma puntos. Además, el reparto también está bastante conseguido.