Director: Davis Guggenheim – Género/Subgénero: Rumores que matan – Reparto: James Marsden, Lena Headey, Norman Reedus, Kate Hudson, Joshua Jackson, Edward James Olmos, Sharon Lawrence, Kris Holden-Ried y Marisa Coughlan entre otros
Argumento: Derrick, Travis y Cathy son tres amigos que conviven en el mismo apartamento. Una noche deciden lanza un rumor al aire sobre una supuesta relación sexual entre Naomi y Beau, una pareja de buena posición social que conocen en una fiesta. El chisme va cambiando de boca en boca, hasta transformarse en un feo asunto de violación donde un posible asesinato también sale a la luz. La broma toma un rumbo muy serio y lo único que importa es que la verdad salga a la superficie.
Una de las mejores películas juveniles que se han realizado en los últimos veinte años que cuenta además con un reparto impresionante que visto hoy día, puede causar curiosidad como poco. Tenemos a James Marsden (de sobra conocido en cine comercial) que va acompañado de Lena Headey (Juego de Tronos) y Norman Reedus (The Walking Dead) que andan secundados por actores y actrices la mar de icónicos e interesantes como Kate Hudson, Edward James Olmos, Joshua Jackson o Kris Holden-Ried. La trama nos cuenta como un simple rumor puede evolucionar hasta convertirse en una noticia falsa (las famosas fake news muy en auge hoy día) y de como la gente puede llegar a creer cualquier cosa, hasta el punto de llegar a destruir su propia vida personal por no verificar los datos que llegan a sus oídos.
Guión sólido, excelente fotografía y firme dirección por parte del interesante realizador Davis Guggenheim, especialista en filmes de carácter documental (volcado estos últimos meses en reportajes sobre el tema de campaña y elección de Joe Biden en Estados Unidos) y al que ya se le notaban buenas tablas detrás de las cámara por aquel entonces. Aparte del tema de las fake news, se tocan otros asuntos delicados como el consentimiento sexual (atención a un par de escenas íntimas que dan que pensar) y de como el feminismo exarcebado (tan de moda últimamente) puede destrozar a otra persona del género contrario. Uno de los productores de la cinta fue ni más, ni menos que el mítico Joel Schumacher. Toda una serie de atractivos que no hacen más que aumentar el interés en Gossip. Un título referente, interesante y complejo que demuestra que el cine juvenil no está limitado a contar tonterías amorosas, si se hace bien.