Director: Charles Band – Género/Subgénero: Vampiros y freaks – Reparto: Jill Michelle, Daniel Lennox, James C. Burns, Jon-Paul Gates y Ricardo Gil entre otros
Argumento: Sugar y su novio Dex prosiguen sus vidas tras su enfrentamiento con la vampiresa Morella. Ahora tendrán que enfrentarse a un grupo de vampiros que regentan un local de striptease y que se alimentan de sus exóticas bailarinas.
Charles Band volvió a la carga con una secuela de Decadent Evil que pese a ser bastante barata en todos los sentidos, tenía cierto grado de entretenimiento como bizarrada pura y dura. Protagoniza la pareja original de su antecesora aunque esta vez sin Phil Fondacaro como cazavampiros. Una continuación algo más aburrida y sin el erotismo de la anterior lo que la hace bajar puntos. Una trama floja, secundarios más malos si cabe y unos villanos que dan más cagarrinas que miedo. Totalmente prescindible pero si viste la primera y pese a saber lo que te espera, te puedes animar una noche con unas cervezas de más.